Fraira, hija del líder de la Tribu Polar, se crió en la capital de Vyce. Tan pronto como tuvo la edad suficiente, fue enviada a aprender artes arcanas. Allí pasó toda su adolescencia y conoció a Morbûa. Se hicieron amigos cercanos con el tiempo. Durante sus años allí, su poder arcano se desarrolló hasta el punto en que podía enfrentarse a peligros que matarían a cualquier Gobreed. En uno de sus enfrentamientos, ella perdió su mano derecha y la reemplazó con una prótesis hecha de Hielo vivo. Al morir su madre, como hermana mayor de dos hermanos, heredó el título de Jefa Tribal hasta el día de hoy.